4 de abril de 2006

EXELENTE DOCUMENTAL (1973)


Y me quede pensando... Este guey si da miedo. Es una mirada penetrante, inteligente, desafiante, segura, sin temor, es la mirada de un hombre nacido en 1973, educado en la clase media del sur de la ciudad de México que mato a su madre y hermanos cuando era adolecente.

1973 es una cinta singular, ganadora del premio JVC al mejor director en el vigésimo festival internacional de cine en guadalajara y opera prima de Antonino Isordia nacido justamente en ese año como los tres protagonistas de su documental que nos muestra tres realidades, cada una describe las historias de poder, amor y desamor de Rodolfo, Mafer y Alejandro. Desde las golpizas en una vocacional protagonizadas por un, hasta entonces, excelente estudiante pasamos por un mundo de drogas y decepción que solo complica la ya de por si caótica vida de Mafer, hasta quedarnos helados ante la descripción de un múltiple homicidio detallado por su autor.
Con un manejo de la imagen moderno usando mucho el blanco y negro en alto contraste, elemento que por momentos llega a cansar, jugando con la velocidad, la textura y el grano de la película y poniendo especial atención en el diseño de audio 1973 te invita a pensar en lo que vale la pena de la vida y lo que no, en como puedes sentirte tan vivo al unir en una deliciosa caída en espiral tu primera chela, tu primera madriza, tu primera relación sexual. en como tu propia familia puede lastimarte tanto y tan lentamente como el agua que orada la piedra, y como hay quien, que para poner un alto al sufrimiento que esto les provoca, sacrifica su salud o su libertad y solo así logran sacudirse ese malestar que los consume. Y de ahí otra pregunta; ¿estos seres atormentados en realidad lograron con esto liberarse? y no hablo de liberarse de un reclusorio o una silla de ruedas, dicen algunos que vayas a donde vayas y hagas lo que hagas nunca podrás alejarte de ti mismo y de lo que en tu cabeza traes. Pero cuando un hombre pasa años, todos los días, todas las horas esperando ser aceptado por su madre y toda su vida se centra en conseguir un te quiero y ese día nunca llega, lo que cualquiera haría es poner un alto a tan frustrante situación y eso fue lo que hizo Alejandro y nos dice “yo ya pase a la historia” y nos describe como, mientras mira fijamente a la cámara y nos intimida... y nos conmueve.

1 comentario:

  1. Practicamente de lo mejor que he visto, me gusto, no es algo clasico, es mas complejo de lo que pudiera parecer...

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